I
Sin planetas moviéndose
Sin nadie detrás de la pared para olvidar.
Ni un gato vengativo
en bajorrelieve.
Ni una horca para divertirse entre mundos.
Sicosis de pareja.
Vértigo de muerte.
Pájaros de sal.
Manicomio de besos y caricias.
Indescifrable y perturbador,
el lado negro del amor.
Es dolor de máxima pureza.
II
Me voy a quedar con la chica
que incendió el granero.
Mi mujer es esa,
le disparó a un policía.
Desolló al labrador rubio
de los hijos del vecino.
Ese perro no paraba de ladrar.
Mi mujer me da hijos
para no estar tan solo
mi mujer me da todo
y le encantan los higos.
Yo me siento tan pijo
cuando estoy con ella
permanece tan bella
sobre el fondo fijo
III
Salimos de la noche
a arrancarnos algo
más que tiempo,
a saquear al otro.
Vine a sacarle el carnaval del vientre.
A tomarla por las fiestas y desatarla.
A meterme con tus cosas.
Vos a reírte en la cara
del pudor, del rio
de vergüenza que hace ruido
a sopapa;
Sonido embarazoso de cupido
Dentro mío.
Detrás de tú,
en la pared, el empapelado
hace cosas raras con los ojos.
Podemos crear una distracción
Un plan de fuga,
una contienda entre olfatos.
La farsa que montemos, no es el lugar.
El sitio real, es imaginario
es un espacio entre letras
entre nosotros,
Béseme, si se atreve.
De tu cítrico almizcle,
De tu orilla real, del borde
salen chispas.
Y yo que siempre fuí
extremadamente inflamable.
A lo lejos
el cuerpo del amor se enfría.
Por allá
se siente el océano,
más fuerte que nunca.
Más tiesos que antes
los amantes
en ridículo, ya no valen.
Nada para nadie.
Nunca para nada.
Nada en el rincón de por ahí;
peces mudos modulan silencio;
apetitos desordenados
alcanzan todo.
Deseos ansiosos
fuertes inclinaciones
tendencia impetuosa.
Al más puro mal jamás diseñado.
Oscuro pantano imaginado
por Dios.
Persona destacada,
Admirada en su cualidad, en fin
supremo creador, barrabrava
Estupendamente, absurdo;
su asidero esta hecho,
igual que mi deseo.
viva los novios.
Sin genero,
murieron antes de nacer.
Sin féretro,
Brindaron antes de partir.