miércoles, marzo 28, 2012














Miércoles de sobras
los buenos momentos cambiaron
al fin otra vez.
El ciclo esquizoide
que me ampara, empalidece.
Con un sentir loopeado
no se juega
no se enjuagan las caricias
ni se seca
la humedad que te succiona
de ese beso.
Sigue el perro tras la zorra
cualquier miércoles de sobras
en la cesta hay una cobra
los amantes que se matan en la obra
abandonan a su público en zozobra
aunque sea solamente una maniobra,
la carencia de modales va de sobra
el destino no condena al que corrobra
y si es nena no es un pobre, es una pobra
aunque adorne sus cabellos con abobras
o se vuelen a su nido las alondras
y en la arena se proyecten mal sus sombras
una lápida de miel crece en la alfombra
en su gémino sub umbra
un ojo límbico me alumbra.

Tu sentir no circunvala?
Te has vestido alguna ves,
del Hombre Bala?

Unos negros se besan en la esquina
y me clavan en la glotis una espina.
No hay alivio ni calmante o codeína,
No le pidas a tu extraño carilinas.
Cuando quiera, ella querrá quererte,
-olvida-
Mientras tanto no le pises la colina.